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Este blog ha sido creado como herramienta de ayuda en la materia de Literatura Universal de bachillerato. En él podréis encontrar apuntes y enlaces relacionados con la materia así como el seguimiento de las fechas de exposiciones orales, entrega de trabajos y exámenes. Ánimo y a trabajar...

miércoles, 9 de noviembre de 2011

EL TEATRO DE WILLIAM SHAKESPEARE

EL TEATRO MODERNO

Entre los siglos XVI y XVII el teatro adquiere, con dramaturgos como Lope de Vega, Calderón de la Barca, Molière y Shakespeare, sus características modernas. Ello fue posible gracias a la nueva valoración de la vida humana surgida con el Renacimiento. La literatura antigua pretendía representar un mundo ideal, de modo que en el teatro griego los conflictos nacían del destino previsto por los dioses para los personajes. La literatura moderna, en cambio, aspira a reflejar la vida real, y los conflictos de los personajes teatrales tendrán mucho que ver con sus sentimientos, vicios y virtudes, así como con su propia historia y con el ambiente que los rodea. Buen ejemplo de todo esto son las treinta y siete obras teatrales que se conservan de William Shakespeare, en las que se mezclan el verso y la prosa. En estas piezas, igual que en la vida, aparecen juntos lo sublime y lo realista, lo trágico y lo cómico, lo importante y lo intrascendente.

EL TEATRO ISABELINO

El teatro isabelino (1558-1625) es una denominación que se refiere a las obras dramáticas escritas e interpretadas durante el reinado de Isabel I de Inglaterra ([reina desde 1558 hasta]-1603), y se asocia tradicionalmente a la figura de William Shakespeare (1564-1616). En realidad los estudiosos extienden generalmente la era isabelina hasta incluir el reinado de Jacobo I († 1625), hablándose entonces de "teatro jacobino", e incluso más allá, incluyendo el de su sucesor, Carlos I, hasta la clausura de los teatros en el año 1642 a causa de la llegada de la Guerra civil ("teatro carolino"). El hecho de que se prolongue más allá del reinado de Isabel I hace que el drama escrito entre la Reforma y la clausura de los teatros en 1642 se denomine Teatro renacentista inglés. Shakespeare le dedica a Jacobo I algunas de sus obras principales, escritas para celebrar el ascenso al trono del soberano, como Otelo (1604), El rey Lear (1605), Macbeth (1606, homenaje a la dinastía Estuardo), y La tempestad (1611, que incluye entre otros una "mascarada", interludio musical en honor del rey que asistió a la primera representación.). El período isabelino no coincide cronológicamente en su totalidad con el Renacimiento europeo y menos aún con el italiano, mostrando un fuerte acento manierista y Barroco en sus elaboraciones más tardías.

WILLIAM SHAKESPEARE (1564-1616)

Shakespeare no es sólo el más importante autor teatral del Barroco inglés, sino, sobre todo, uno de los grandes genios de la literatura universal. Con él, el género dramático alcanza la modernidad y recupera a la vez la hondura del teatro griego, perdido en la época medieval. Sus obras nos han dejado, además, un nutrido grupo de personajes inolvidables. Dramaturgo y escritor inglés nacido en Stratford a orillas del río Avon. Desde niño tuvo inclinación hacia en teatro. Se sabe que reveses de fortuna le impidieron terminar su educación formal. De joven integró la compañía de actores "Del gran Chambelán", y desde 1603 en la "Compañía del Rey" con la que se asocia y para la que escribe todas sus obras. Tuvo buenas remuneraciones, y su reputación literaria se fue afirmando. Casi la mitad de las obras que se le han atribuido fueron impresas en forma póstuma. Los 154 sonetos de Shakespeare, escritos en 1595 y publicados en 1609, son meditaciones sintéticas sobre el amor, la muerte, la fidelidad, la belleza, etc. La ambigüedad del lenguaje y de los seres es uno de los temas principales de la obra de Shakespeare. Muere en 1616, en su ciudad natal.

Su producción puede ser dividida en tres grupos:
  1. Dramas históricos.
  2. Comedias.
  3. Tragedias.
1) Dramas históricos. Su tema fundamental es la despiadada lucha por el poder. Los personajes históricos aparecen humanizados, lejos del habitual tono legendario y mítico. Por su ambientación, se distinguen dos tipos:
Historia inglesa: diez piezas en las que se repasan casi tres siglos de la historia de Inglaterra, especialmente conflictivos por sus continuas guerras civiles. Destacan los siguientes títulos:
o Ricardo III: su malvado protagonista, el jorobado Gloucester, sirve al autor para reflexionar sobre el tema del mal.
o Enrique IV (dos partes): un personaje secundario, el vividor, glotón y cobarde Falstaff, se hizo tan popular que obligó a Shakespeare a hacerle reaparecer en la comedia Las alegres casadas de Windsor.
Historia antigua: de ambientación grecolatina, son:
o Julio César: centrada en la figura de Bruto, que asesina a César para devolver la libertad a Roma, pero fracasa al ser víctima de la ambición de otros conjurados.
o Antonio y Cleopatra: el amor de los protagonistas, un general romano y una reina egipcia, opuesto a los intereses políticos de la época, les conduce a la muerte.
2) Comedias. Las comedias de Shakespeare destacan por el virtuosismo técnico del enredo y por su indagación en los sentimientos. En muchas domina un ambiente italianizante y cortesano, como en Mucho ruido y pocas nueces, La fierecilla domada o Bien está lo que bien acaba. Las dos piezas más importantes de este grupo son:
-Sueño de una noche de verano: de carácter alegre y fantástico, narra varios enredos amorosos durante la noche de San Juan, en tres niveles distintos pero entrelazados: los pobres, los aristócratas y los seres mágicos del bosque. Es la obra más optimista del autor.
-El mercader de Venecia: pese a su final feliz, la melancolía del protagonista y el odio del judío Shylock, que arremete contra el antisemitismo en un famoso monólogo, dan a esta pieza un fondo amargo.
3) Tragedias. Obras de madurez, casi todas, son la cumbre del teatro de Shakespeare. A través de sus protagonistas, símbolos de las distintas pasiones del hombre, el dramaturgo traza un profundo retrato de la complejidad del alma humana y de las grandes dificultades de la vida.
Romeo y Julieta: la enemistad entre sus respectivas familias y la fatalidad se alían para impedir la unión entre los jovencísimos protagonistas, prototipos de amantes apasionados.
Hamlet: príncipe de Dinamarca, al protagonista se le aparece el fantasma de su padre asesinado exigiendo venganza. Las dudas y la indecisión, expresadas en famosos monólogos, torturan al joven, pues entre los culpables están su madre y el padre de su amada. Al final, a costa de su propia vida, consumará el sangriento castigo.
Otelo: el malvado Yago, fomenta los celos de Otelo, quien llegará a estrangular a su amada mujer, la inocente Desdémona.
Macbeth: la ambición de poder, alentada por su esposa, lleva al noble escocés Macbeth al crimen. Conseguirá la corona, pero ambos sufrirán terribles remordimientos antes de su trágico final.
• El rey Lear: el anciano protagonista, tras intentar medir el amor de sus hijas, destierra a la única que le quiere de verdad, engañado por la hipocresía de las otras dos. Acabará destronado, abandonado por todos y medio loco.